¿En qué consiste el tratamiento de la gastroenteritis?
El tratamiento de la gastroenteritis depende del origen de la infección (vírica, bacteriana o parasitaria), la gravedad de los síntomas y la condición general del paciente. En la mayoría de los casos, se trata de una enfermedad autolimitada que mejora por sí sola con medidas de soporte. Sin embargo, es fundamental controlar los síntomas y evitar la deshidratación, especialmente en niños, personas mayores o pacientes con enfermedades crónicas.
Cuidados básicos en casa
La base del tratamiento de la gastroenteritis es el alivio sintomático. Estas son las recomendaciones más importantes:
- Hidratación constante: es la prioridad. Se debe reponer el líquido perdido por vómitos y diarrea con agua, caldos suaves o soluciones de rehidratación oral.
- Dieta suave y progresiva: cuando se tolere el líquido, se pueden introducir alimentos blandos y fáciles de digerir como arroz, patata cocida, zanahoria, plátano maduro o manzana asada.
- Reposo: descansar ayuda al cuerpo a recuperarse más rápidamente.
- Buena higiene: lavarse las manos con frecuencia y desinfectar superficies reduce el riesgo de contagio.
Estas medidas suelen ser suficientes en la mayoría de los casos de gastroenteritis leve.
¿Es necesario tomar medicamentos?
En general, no se recomienda el uso de antibióticos para tratar la gastroenteritis, ya que la mayoría de los casos son de origen viral. El tratamiento farmacológico solo se indica en situaciones específicas y bajo prescripción médica:
- Antibióticos: solo si el médico confirma una infección bacteriana como Salmonella o Shigella.
- Antiparasitarios: si se detecta una infección por Giardia lamblia u otro parásito intestinal.
- Antieméticos o antidiarreicos: pueden utilizarse para aliviar los síntomas, pero deben administrarse con precaución y siempre con indicación médica, especialmente en niños.
- Probióticos: en algunos casos ayudan a restablecer la flora intestinal, aunque su uso debe ser valorado por un profesional.
Qué alimentos evitar durante la recuperación
Mientras duren los síntomas, conviene evitar ciertos alimentos que pueden irritar el aparato digestivo o empeorar la diarrea:
- Lácteos (salvo en versiones sin lactosa si se toleran).
- Alimentos ricos en grasas o fritos.
- Bebidas gaseosas, zumos industriales o refrescos.
- Café, alcohol o infusiones muy estimulantes.
- Productos ultraprocesados o con alto contenido en azúcar.
La recuperación será más rápida si se opta por una alimentación suave y sin irritantes.
Cuidados especiales en niños y personas mayores
Los extremos de la vida (niñez y vejez) son más vulnerables a las complicaciones de la gastroenteritis, sobre todo a la deshidratación. Algunas recomendaciones específicas incluyen:
- Ofrecer líquidos con frecuencia, incluso en pequeñas cantidades si hay vómitos.
- Utilizar sueros de rehidratación oral disponibles en farmacias.
- Evitar medicamentos sin indicación médica.
- Estar atentos a signos de deshidratación: ojos hundidos, somnolencia, boca seca, llanto sin lágrimas.
- Consultar al pediatra o médico de cabecera ante cualquier duda o si no hay mejoría en 24-48 horas.
¿Cuándo acudir al médico?
Aunque la gastroenteritis suele resolverse sola, es importante consultar con un profesional si aparecen:
- Signos de deshidratación (mareo, orina escasa, boca seca).
- Vómitos persistentes que impidan la hidratación.
- Diarrea con sangre o moco.
- Fiebre alta que no cede.
- Síntomas que duran más de 3 días.
- En el caso de bebés, personas mayores o pacientes con enfermedades previas.
Una evaluación médica permitirá descartar complicaciones y pautar un tratamiento específico si es necesario.
Prevención para evitar nuevos episodios
Para prevenir la gastroenteritis y evitar nuevos brotes en el entorno familiar, se recomienda:
- Lavarse bien las manos, especialmente antes de comer y después de ir al baño.
- Consumir alimentos bien cocinados y agua potable.
- Evitar el contacto con personas enfermas.
- En niños, completar el calendario de vacunación (incluye vacuna contra rotavirus).
- Desinfectar objetos y superficies si alguien en casa está enfermo.
Preguntas frecuentes sobre el tratamiento de la gastroenteritis
¿Cuánto dura una gastroenteritis?
Generalmente entre 1 y 3 días. En algunos casos puede prolongarse hasta una semana, especialmente si hay una infección bacteriana o parasitaria.
¿Puedo tomar medicamentos sin receta?
No es recomendable automedicarse. Algunos antidiarreicos o antieméticos pueden ser contraproducentes, especialmente en niños o personas con enfermedades crónicas.
¿Cuándo puedo volver a mi dieta habitual?
Una vez se tolere bien la dieta blanda y desaparezcan los síntomas digestivos, puede reintroducirse progresivamente la alimentación normal.
¿Es contagiosa la gastroenteritis?
Sí, especialmente la de origen viral. La higiene de manos y la limpieza del entorno son claves para evitar la transmisión.
Conclusión
El tratamiento de la gastroenteritis se basa en el control de los síntomas, la hidratación y el seguimiento médico en los casos más delicados. Con una alimentación adecuada, descanso y medidas higiénicas, la mayoría de los pacientes se recuperan sin complicaciones. Ante cualquier señal de alerta o si los síntomas se prolongan, es importante acudir a un profesional sanitario.