¿Cuáles son los síntomas de la enfermedad del Parkinson?

En Sanitas Mayores somos expertos en Parkinson, por eso sabemos que la enfermedad no afectan a todas las personas de la misma forma y que el desarrollo de los síntomas es distinto en cada uno. Por este motivo, el Parkinson es difícil de detectar en algunas ocasiones: en general aparecen de forma muy gradual y al principio son sutiles. Sin embargo, los síntomas de esta enfermedad comienzan a apreciarse normalmente en un lado del cuerpo, extendiéndose con el tiempo al resto de zonas. Las dificultades para realizar las tareas cotidianas o los temblores en las manos son los primeros síntomas en aparecer.

Los principales síntomas del Parkinson

  • Temblor

    Se trata de uno de los síntomas que más relacionamos con el Parkinson. Es un temblor que suele aparecer cuando la persona está en reposo o en situaciones de mucho estrés, y en general comienza a manifestarse en una mano, en un pie o en la mandíbula.

  • Rigidez

    En este caso, el cuerpo se opone al movimiento. El enfermo siente dolores musculares debido al constante estado de tensión y contracción.

  • Bradicinesia

    Este síntoma del Parkinson se caracteriza por la lentitud en los movimientos y la pérdida de las acciones espontáneas y voluntarias. Se trata de uno de los síntomas más frustrantes de la enfermedad del Parkinson, ya que la persona es consciente de que ya no puede ejecutar los movimientos cotidianos con la misma rapidez y espontaneidad.

  • Inestabilidad postural

    Se refiere a los casos en los que la persona tiene dificultades para mantenerse en pie o para caminar. Las caídas constantes son resultado de los problemas que presentan los enfermos para mantener el equilibrio y la coordinación de todos sus miembros.

  • Dificultades para caminar y deterioro de las expresiones faciales

    La rigidez y la bradicinesia hacen que el enfermo de Parkinson no pueda caminar correctamente, ya que sus movimientos son lentos y se hacen más difíciles. Esta problemática también se presenta a la hora de mostrar sus expresiones faciales, que se ven afectadas y menguadas. Es común, por tanto, que las personas que padecen Parkinson caminen despacio y con pasos muy cortos.