Tratamientos para la degeneración macular: guía completa

07/09/2025
degeneración macular asociada a la edad

La degeneración macular es una de las causas más frecuentes de pérdida de visión en mayores de 55 años. Se trata de una enfermedad progresiva que afecta a la mácula, la parte central de la retina responsable de la visión detallada. Aunque no siempre puede revertirse, hoy existen múltiples opciones de tratamiento y prevención que pueden frenar su evolución y mejorar la calidad de vida de los pacientes.

¿Qué es la degeneración macular?

La degeneración macular asociada a la edad (DMAE) es una afección ocular crónica que afecta directamente a la mácula, la zona central de la retina responsable de la visión detallada. Este deterioro progresivo reduce la capacidad para ver con claridad en el centro del campo visual, aunque la visión periférica se suele conservar. Es una de las principales causas de pérdida de visión en personas mayores y su impacto en la calidad de vida puede ser muy significativo si no se detecta a tiempo.

La persona con DMAE puede experimentar dificultad para leer, reconocer caras o realizar tareas que requieren precisión visual, como coser o escribir. La detección precoz y el seguimiento oftalmológico adecuado son clave para frenar su avance.

Tipos de degeneración macular (seca y húmeda)

La degeneración macular se clasifica en dos grandes tipos, cada uno con características y pronóstico distintos:

Degeneración macular seca: es la forma más común, representando entre el 85 y el 90 % de los casos. Se desarrolla lentamente con el tiempo. Su origen está en el envejecimiento y adelgazamiento de los tejidos de la mácula, junto con la acumulación de depósitos llamados drusas. Estos residuos pueden afectar gradualmente la visión central. Aunque es menos agresiva, puede progresar hasta una forma avanzada si no se controla.

Degeneración macular húmeda: es menos frecuente pero más grave y rápida en su evolución. En esta forma, se desarrollan vasos sanguíneos anómalos bajo la retina que tienden a filtrar sangre o líquido, causando inflamación, cicatrices y un deterioro visual acelerado. Sin tratamiento, puede provocar una pérdida severa de visión en poco tiempo.

Cada tipo requiere un enfoque terapéutico distinto, por lo que es importante realizar un diagnóstico diferencial preciso.

Síntomas y diagnóstico de la degeneración macular

Durante las primeras etapas, la DMAE puede no presentar síntomas evidentes, lo que retrasa el diagnóstico. Sin embargo, conforme avanza, se manifiestan signos visuales que deben generar alerta, especialmente en la tercera edad:

  • Visión borrosa o pérdida de nitidez en el centro del campo visual
     
  • Percepción distorsionada (por ejemplo, ver las líneas rectas como curvas)
     
  • Necesidad de más luz para leer o realizar tareas precisas
     
  • Dificultad para distinguir detalles pequeños
     
  • Aparición de una mancha oscura o punto ciego en la visión central

Para confirmar el diagnóstico de la degeneración macular, el oftalmólogo puede recurrir a distintas pruebas clínicas especializadas. Una de las más habituales es la rejilla de Amsler, un sencillo test que permite detectar posibles distorsiones visuales en el campo central, incluso desde casa. Esta prueba es útil para identificar las alteraciones típicas de la DMAE húmeda en sus fases iniciales.

Otra herramienta a destacar es la tomografía de coherencia óptica (OCT), que proporciona imágenes transversales de alta resolución de la retina. Gracias a esta tecnología, se pueden observar con claridad los cambios estructurales que afectan a la mácula y valorar la acumulación de líquido o el grosor del tejido retiniano.

En algunos casos, se utiliza también la angiografía con fluoresceína, una prueba que permite visualizar los vasos sanguíneos del fondo del ojo mediante un contraste. Es especialmente útil para detectar vasos anómalos o filtraciones asociadas a la forma húmeda de la enfermedad. Por último, el examen de fondo de ojo sigue siendo una exploración básica para observar la presencia de drusas o cualquier otro signo de daño macular.

La combinación de estas pruebas facilita un diagnóstico preciso y una planificación adecuada del tratamiento. Por eso, es recomendable acudir a revisiones oftalmológicas periódicas a partir de los 60 años, incluso en ausencia de síntomas, ya que una detección temprana puede frenar el avance de la enfermedad y preservar la visión durante más tiempo.

Opciones de tratamiento para la degeneración macular

El abordaje depende del tipo de degeneración y el grado de avance. Aunque la DMAE seca no tiene un tratamiento curativo, sí existen estrategias para ralentizar su progresión. En el caso de la DMAE húmeda, se han logrado avances significativos con fármacos inyectables.

Tratamientos para degeneración macular seca

  • Suplementos nutricionales: La combinación de antioxidantes, zinc, luteína y vitamina C y E (formulación AREDS2) puede retrasar el avance de la forma seca en estadios intermedios.
     
  • Control del estilo de vida: Evitar el tabaco, mantener una dieta rica en vegetales de hoja verde y pescado azul, y controlar enfermedades como la hipertensión o la diabetes.
     
  • Seguimiento periódico: Revisiones oftalmológicas frecuentes permiten detectar cualquier cambio que indique progresión hacia la forma húmeda.
     

Tratamientos para degeneración macular húmeda

  • Inyecciones intravítreas: los fármacos antiangiogénicos (como ranibizumab, aflibercept o brolucizumab) bloquean el crecimiento de vasos anómalos en la retina. Su aplicación periódica permite estabilizar o incluso mejorar la visión en muchos casos.
     
  • Terapia fotodinámica: menos usada hoy en día, consiste en la administración de un medicamento fotosensible activado con láser para cerrar vasos dañinos.
     
  • Cirugía láser: en casos seleccionados y con indicaciones específicas.
     

En España, el precio del tratamiento de la degeneración macular húmeda con inyecciones anti-VEGF puede variar si se realiza por vía privada, pero está cubierto por la sanidad pública y en muchos seguros médicos, como los de Sanitas.

Terapias emergentes y avances médicos

La investigación actual se centra en nuevas alternativas como:

  • Terapias génicas para corregir fallos celulares responsables del daño en la mácula
     
  • Fármacos de liberación prolongada que reduzcan la frecuencia de las inyecciones
     
  • Prótesis retinianas y tecnologías de apoyo visual
     

Aunque muchas de estas opciones están en fase de estudio, abren la puerta a un manejo más cómodo y efectivo en el futuro.

En Sanitas, contamos con especialistas en oftalmología y atención integral para mayores, con seguimiento personalizado y apoyo en todas las fases del tratamiento. Si necesitas más información o asistencia para ti o un familiar, puedes consultar los servicios de salud visual de Sanitas o acudir a uno de nuestros centros médicos especializados.

Cuidado y prevención en pacientes con degeneración macular

La degeneración macular no siempre se puede evitar, pero ciertos hábitos pueden contribuir a proteger la salud ocular y frenar su avance.

Hábitos saludables para la salud visual

  • Dieta rica en antioxidantes: frutas y verduras de colores intensos, como espinacas, zanahorias, arándanos o brócoli, contienen nutrientes que benefician a la retina.
     
  • Evitar el tabaco: fumar duplica el riesgo de padecer DMAE.
     
  • Uso de gafas de sol: la protección contra los rayos UV puede ayudar a preservar la mácula.
     

Importancia de revisiones periódicas

Detectar la enfermedad en sus fases iniciales es clave. Si tienes más de 60 años, antecedentes familiares o factores de riesgo cardiovascular, es recomendable:

  • Acudir al oftalmólogo al menos una vez al año
     
  • Consultar de inmediato ante síntomas como visión borrosa o manchas en la visión central
     
Miryam Piqueras Bravo

Miryam Piqueras Bravo

Directora de Gobierno Clínico de Sanitas Mayores

Contenido revisado por profesionales médicos y especializados de Sanitas Mayores.

La información facilitada por este medio no puede, en modo alguno, sustituir a un servicio de atención médica directa, así como tampoco debe utilizarse con el fin de establecer un diagnóstico, o elegir un tratamiento en casos particulares. En este servicio no se hará ninguna recomendación, explícita o implícita, sobre fármacos, técnicas, productos, etc... que se citarán únicamente con finalidad informativa. La utilización de este servicio se lleva a cabo bajo la exclusiva responsabilidad de los usuarios.

En este servicio no se hará ninguna recomendación, explícita o implícita, sobre fármacos, técnicas, productos, etc... que se citarán únicamente con finalidad informativa. La utilización de este servicio se lleva a cabo bajo la exclusiva responsabilidad de los usuarios.

La utilización de este servicio se lleva a cabo bajo la exclusiva responsabilidad de los usuarios.

Contar con la confianza de Sanitas al mejor precio
Conoce nuestros servicios para mayores
  • Residencias con equipo experto y actividades adaptadas.
  • Centros de día con horarios flexibles.
  • Cuidados a domicilio: cuidador, médico, fisioterapia, neuropsicología, etc.
Llama gratis Te llamamos