Se denomina fluoración a cualquier procedimiento que permita la aplicación de flúor sobre los dientes con el fin de prevenir la aparición de las caries. El flúor ralentiza el proceso de desmineralización de los dientes y aumenta el índice de remineralización. Es por ello que se considera un tratamiento de carácter preventivo y se utiliza preferentemente en niños.
No obstante, la fluoración tiene indicaciones concretas:
- Aparición de puntos blancos en los dientes y, por tanto pacientes en los que se ha iniciado el desarrollo de caries.
- Pacientes con riesgo moderado o alto de desarrollar caries.
- Personas en tratamiento ortodóncico.
- Protección adicional en caso de necesidad para los niños en áreas sin agua potable fluorada.
- Para reducir la sensibilidad de los dientes.
- Cuando la producción de saliva es insuficiente.
Métodos de fluoración
Desde un punto de vista estricto, la fluoración no previene la aparición de caries, sino que controla el ritmo de desarrollo de las mismas: se remineraliza el esmalte mediante la formación de fluoropatita y por tanto evitan su desmineralización. Asimismo controla la formación de placa bacteriana.
Desde esta perspectiva, la fluoración puede realizarse de diferentes formas:
- Dentífricos: contienen un 1,1% de fluoruro de sodio, cantidad que se ha demostrado efectiva y segura para la prevención de caries, siempre y cuando se realicen tres cepillados dentales diarios.
- Geles y espumas: están especialmente indicados en pacientes con riesgo elevado de desarrollar caries o que tienen sequedad de boca, aquellos que a los que se ha realizado una ortodoncia y los que están siendo sometidos a radioterapia craneal. Se suele aplicar en la consulta del odontólogo, mediante el uso de un contenedor que se ajusta a la forma de las arcadas dentales. Ésta debe mantenerse apretada con los dientes unos cuatro minutos en cada aplicación, tras la cual no se debe comer, fumar o beber, durante la media hora siguiente. Existen algunos geles que se pueden utilizar en casa con la misma técnica que el dentífrico.
- Enjuagues bucales: los colutorios que contienen flúor no deben ser utilizados por niños, para evitar que lo ingieran.
Riesgos de la fluoración
El flúor es una sustancia tóxica por lo que siempre que se realice un proceso de fluoración debe evitarse su ingesta.