Cuesta mucho tomar la decisión de ingresar a un familiar en una residencia, pero cuando conocimos el centro supimos enseguida que nuestra madre estaría estupenda y bien cuidada. La residencia es bonita, alegre, su personal inmejorable y la dirección, doctora y asistente social son lo más!!!!!!!!!! Nos hemos sentido como en casa, el trato es fantástico, conocen a todos sus internos por su nombre!!! y nos han ayudado mucho con ella. Muchas gracias a todas por este tiempo! (nuestra madre murió este viernes, de viejecita, y muy acompañada).