¿Qué hay que hacer para detectar la elevación de la presión intraocular (PIO)?
Es importante que todas las personas mayores de 45-50 años se sometan al menos una vez cada dos años a una prueba de medición de la PIO. Las mayores de 60 deberán hacerlo anualmente. Por otra parte, las personas con familiares que han sufrido un glaucoma deberían realizar anualmente a esta revisión a partir de los 35-40 años.
Si se tiene la presión intraocular elevada, ¿supone siempre la existencia de un glaucoma?
Sólo hay glaucoma cuando el nervio óptico está dañado. Si no es así, la elevación de la presión intraocular únicamente indica que existe un riesgo claro de que pueda producirse un glaucoma, si bien esto no tiene porqué ocurrir. En cualquier caso, cuando es el resultado de una revisión ocular rutinaria deberá realizarse una exploración ocular en profundidad para confirmar o descartar un diagnóstico de glaucoma.
¿Se puede desarrollar un glaucoma sin que aumente de la presión ocular?
Sí; es lo que se conoce como glaucoma normotenso y se puede producir como consecuencia de diferentes factores. La enfermedad cardiovascular, la hipertensión arterial mal controlada, la diabetes, la insuficiencia respiratoria, la apnea del sueño o la migraña son, junto a la edad, los más significativos.
¿Puedo tener glaucoma en un solo ojo?
En una fase inicial es posible que el glaucoma se presente sólo en un ojo, pero es probable que acabe por afectar a los dos, ya que suele desarrollarse a distintas velocidades en cada ojo.
¿Se puede recuperar la visión perdida por causa de un glaucoma?
Los daños producidos en el nervio óptico son irreversibles, pero existen técnicas y dispositivos que permiten a los pacientes aprovechar al máximo la vista que aún conservan. El oftalmólogo le indicará cómo acceder a ellos.
¿Cuáles son los síntomas del glaucoma?
Depende del tipo de glaucoma. En general, el glaucoma de ángulo abierto inicialmente sólo produce síntomas cuando está en una fase avanzada, salvo una leve pérdida de visión lateral, que habitualmente pasa desapercibida. Sin embargo, el glaucoma de ángulo cerrado, que ocurre de forma repentina, presenta síntomas inmediatamente, entre ellos dolor, náuseas o vómitos. En el caso del glaucoma normotenso, puede apreciarse una pérdida de visión central.
¿Se puede curar el glaucoma?
Los daños que ya se hayan producido en el nervio óptico en el momento del diagnóstico son irreversibles, pero tanto el tratamiento farmacológico como en su caso el quirúrgico pueden frenar o retrasar su evolución.
¿Cómo se controla el glaucoma?
El tratamiento dependerá del tipo de glaucoma. Si se trata de un glaucoma de ángulo abierto puede ser suficiente con tratamiento farmacológico con colirios específicos. En el caso de un glaucoma agudo o de ángulo cerrado será necesaria la cirugía.