La intervención quirúrgica con la que se implanta la prótesis de cadera se realiza generalmente mediante técnicas mínimamente invasivas, como es el caso de la artroscopia, por lo que la rehabilitación se puede iniciar casi de forma inmediata. De hecho, la movilización del paciente se inicia al día siguiente de la intervención con el apoyo de un fisioterapeuta con el fin de evitar la atrofia muscular y favorecer el drenaje de la zona para reducir la inflamación.
En el postoperatorio inmediato los ejercicios deben ajustarse al tipo de intervención que se ha realizado y las características de cada paciente. Éste, salvo indicación contraria, podrá empezar a apoyar el pie en el suelo, valiéndose de muletas o de un andador, a las 24 horas de la intervención. La fisioterapia se iniciará con ejercicios de flexión de tobillo, rodilla y cadera en descarga (tumbados) con el fin de tonificar todos los músculos de las extremidades inferiores y fortalecer la musculatura de la cadera con el fin de estabilizarla y favorecer la marcha.
En el momento en que la cicatriza se haya cerrado completamente, se puede iniciar una rehabilitación en piscina, ya que en el agua el peso que de soportar la articulación es mucho menor y de este modo se podrá acelerar la recuperación.
Normalmente, al paciente se le da de alta a los 4-5 días de ser intervenido, por lo que a partir de ese momento deberá mantener una serie de precauciones en las siguientes seis semanas:
- No flexionar la cadera más de 90º, es decir que cuando se está sentado la rodilla debe estar siempre en una posición inferior a la cadera.
- Se debe tener cuidado con el movimiento de las piernas: no cruzarlas, evitar poner la punta del pie hacia el interior (no se debe rotar la articulación) y los giros bruscos de la pierna, al levantarse de una silla o de la cama hay que estirar primero la pierna operada y luego apoyarse sobre la sana y si es necesario ayudándose con los brazos.
- Se debe dormir boca arriba.
- Hay que utilizar un calzador largo para ponerse los zapatos y un dispositivo similar para los calcetines.
- En las escaleras hay que subir o bajar los escalones de uno en uno utilizando siempre la pierna sana en primer lugar.
- Se aumentará progresivamente la distancia al caminar en la medida en que se gane estabilidad en la marcha, eliminando las muletas cuando se sienta seguridad.
Todo ello se debe complementar con un proceso de rehabilitación en la consulta de fisioterapia, en la que se realizarán ejercicios específicos para reforzar la musculatura, mejorar la coordinación y ganar estabilidad. El fisioterapeuta indicará qué ejercicios se deben realizar en el domicilio.