¿Qué es el dolor de espalda y por qué aparece?
El dolor de espalda es una molestia muy común que afecta tanto a personas activas como sedentarias. Puede originarse en los músculos, los ligamentos, las articulaciones o los discos intervertebrales.
Las causas más habituales son:
- Malas posturas al sentarse, caminar o dormir.
- Falta de actividad física, que debilita la musculatura de sostén.
- Tensión emocional o estrés, que genera rigidez en cuello y espalda.
- Levantamiento incorrecto de pesos o movimientos bruscos.
- Sobrepeso, que aumenta la carga sobre la columna.
¿Cómo prevenir el dolor de espalda en el día a día?
Para evitar el dolor de espalda, es clave adoptar buenos hábitos posturales y de movimiento:
- Si trabajas sentado, mantén la espalda recta y los pies apoyados.
- Haz pausas activas cada hora: levántate, camina y estira.
- Utiliza sillas ergonómicas con buen apoyo lumbar.
- Evita estar de pie mucho tiempo en la misma posición.
- Duerme en colchones firmes y usa almohadas que respeten la alineación cervical.
¿Qué ejercicios ayudan a evitar el dolor de espalda?
El ejercicio es uno de los pilares fundamentales para prevenir el dolor de espalda. Las mejores opciones incluyen:
- Natación: fortalece sin impacto articular.
- Yoga o pilates: mejoran la flexibilidad, la postura y el control del cuerpo.
- Entrenamiento del core: ayuda a estabilizar la columna. Incluye planchas, puentes y abdominales isométricos.
- Estiramientos suaves: mantener la elasticidad evita sobrecargas musculares.
Hacer ejercicio al menos tres veces por semana favorece una espalda fuerte, flexible y resistente al dolor.
¿Qué cuidados tener en el trabajo para evitar molestias?
Si trabajas frente al ordenador o pasas mucho tiempo sentado, sigue estas recomendaciones:
- Ajusta la altura de la pantalla a la altura de los ojos.
- Usa una silla con respaldo firme y apoyabrazos.
- Mantén los antebrazos apoyados en la mesa.
- Apoya completamente los pies en el suelo (usa reposapiés si lo necesitas).
- Tómate pausas de 5 minutos cada hora para moverte o estirar la espalda.
¿Qué señales indican que debes acudir a un médico?
Consulta a un profesional si:
- El dolor persiste durante varios días sin mejoría.
- Se irradia hacia una pierna o va acompañado de hormigueo.
- Empeora por la noche o con el reposo.
- Impide hacer actividades cotidianas como caminar o agacharte.
Un especialista podrá descartar hernias, contracturas graves o problemas estructurales. En algunos casos se indica fisioterapia, imagen diagnóstica o medicación específica.
Consejos clave para evitar el dolor de espalda
- Actívate: el movimiento es el mejor aliado de tu espalda.
- Corrige la postura en todas tus rutinas diarias.
- Controla el estrés con técnicas de relajación o mindfulness.
- Evita el sobrepeso, ya que sobrecarga la zona lumbar.
- Consulta ante cualquier dolor persistente o incapacitante.