El complejo de demencia asociado al sida es la única patología causada por la acción directa del virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) y la desarrollan entre el 20 y el 35% de las personas seropositivas, incluso si no han desarrollado el sida. Algunos estudios parecen demostrar que el VIH penetra en el cerebro apenas dos días después de adquirirse la infección, pudiendo dañar las células del cerebro, aun cuando no se conoce el mecanismo por el que esto sucede.
Asimismo, los expertos consideran que existe un factor de riesgo importante de que las personas seropositivas desarrollen el complejo de demencia asociado al sida y es que el recuento de células CD4 no supere los 200, que es el momento en que se considera que se debilita el sistema inmunitario. De ahí que se recomiende iniciar el tratamiento antes de que alcance esta cifra, aun cuando ésta no sea en algunos casos una condición suficiente para prevenir este tipo de demencia.
Síntomas del complejo de demencia asociado al sida
En la fase inicial del complejo de demencia asociado al sida, lo síntomas son los siguientes:
• Dificultad para aprender cosas nuevas
• Dificultad para recordar cosas del pasado
• Cambios de comportamiento
• Confusión
• Depresión
La progresión de la demencia lleva a la aparición de otros síntomas:
• Dificultades en el habla
• Problemas en la visión
• Problemas para mantener el equilibrio
• Dificultades al caminar
• Incontinencia urinaria
• Episodios maníacos y psicóticos
Tratamiento del complejo de demencia asociado al sida
El tratamiento del complejo de demencia asociado al sida es el mismo que con el que se trata la infección por VIH, es decir con antirretrovirales. Sin embargo no todos los medicamentos de este tipo actualmente disponibles sirven para ellos, ya que algunos no son capaces de penetrar la barrera hematoencefálica.
Pese a que con el tratamiento antirretroviral se reduce significativamente la presencia del VIH en el organismo, lo cierto es que no todos los pacientes con complejo de demencia asociado al sida responden del mismo modo. En algunos casos se logra una remisión progresiva de los síntomas, en otros permanecen estables y en otros incluso empeoran, por lo que en ocasiones es necesario utilizar medicamentos específicos para tratar los síntomas.