¿Qué es la toxoplasmosis?
La toxoplasmosis es una infección causada por un parásito al que se conoce como Toxoplasma gondii, que puede encontrarse tanto en los seres humanos como en animales y que se puede adquirir de diferentes formas:
- Comer carne cruda o poco hecha.
- Contacto con las heces de gato.
- Ingerir tierra contaminada.
- Aunque improbable, por transfusiones de sangres o trasplantes de órganos.
Síntomas de la toxoplasmosis
La toxoplasmosis puede no producir síntomas, pero en general estos aparecen una o dos semanas después de producirse la infección:
- Fiebre.
- Dolor de Cabeza.
- Dolor de garganta.
- Dolor muscular.
- Inflamación de los ganglios situados en el cuello y la cabeza
Tratamiento de la toxoplasmosis
El tratamiento de la toxoplasmosis se realiza con medicamentos antipalúdicos y antibióticos. No obstante, la enfermedad puede reaparecer en cualquier momento.
Embarazo y toxoplasmosis
En los bebés que han sido contagiados con la toxoplasmosis por sus madres durante elembarazo la enfermedad puede revestir una mayor gravedad.
En los casos leves pueden incluso permanecer asintomáticos durante años, pero si no se les somete a tratamiento pueden surgir complicaciones muy graves:
- Hidrocefalia.
- Daños en el sistema nervioso.
- Diarrea.
- Vómitos.
- Pérdida de audición.
- Pérdida de visión.
- Ictericia.
- Bajo peso al nacer.
- Hepatomegalia.