La diversidad de discapacidades abarca una amplia gama de condiciones que pueden afectar a las personas de diferentes maneras. Las discapacidades pueden ser físicas, sensoriales, intelectuales o mentales, y cada una presenta sus propios desafíos y necesidades.
Por ejemplo, las personas con discapacidad física pueden limitar la movilidad, lo que puede hacer que actividades cotidianas como caminar o realizar tareas domésticas resulten complicadas. Las discapacidades sensoriales, como la ceguera o la sordera, pueden afectar la forma en que una persona interactúa con su entorno y se comunica con otros. Por otro lado, las discapacidades intelectuales pueden influir en la capacidad de una persona para aprender, comunicarse o manejar situaciones sociales.
Estas discapacidades pueden impactar en la salud, además de en otros ámbitos como el acceso a la educación y el empleo o las relaciones personales. La inclusión y el apoyo adecuado son clave para ayudar a las personas con discapacidades a llevar una vida plena y satisfactoria.
Beneficios de contar con un seguro de salud pensado para personas con discapacidad
Contar con un seguro de salud inclusivo, es decir, que cubra las necesidades de una persona discapacitada es muy recomendable ya que puede contribuir a su seguridad y tranquilidad mental. Por supuesto, y dado que estas personas suelen tener que asumir costes significativamente altos, es importante que el seguro de salud sea accesible económicamente.
Un seguro adecuado o inclusivo debería ofrecer:
- Acceso a atención médica especializada con médicos y especialistas que comprendan las necesidades específicas de las personas con discapacidad.
- Cuadro médico y red de centros asistenciales amplios.
- Coberturas de tratamientos y terapias especializadas.
- Servicios a domicilio.
- Prevención y chequeos regulares: la prevención es importantísima para nuestro bienestar, pero para personas con discapacidad, la atención preventiva es clave.
- Apoyo en caso de emergencias médicas.
¿Qué es un seguro de salud y cómo funciona?
Un seguro de salud es un contrato entre una persona y una compañía de seguros que ayuda a cubrir los costes de atención médica. Cuando tienes un seguro de salud, pagas una prima (una cantidad de dinero) regularmente, y a cambio, la aseguradora se compromete a cubrir parte de tus gastos médicos.
Según el producto que tengas contratado, puedes haber optado por la fórmula del copago. El copago consiste en que pagas una cantidad fija por ciertos servicios médicos, como una visita al médico o una intervención ambulatoria. Por ejemplo, podrías pagar 10€ cada vez que vayas al especialista, o 6€ cada vez que recibas un servicio de podología.
La cobertura también variará según el producto contratado. Puede incluir o no pruebas diagnósticas complejas, cobertura dental, cirugía, hospitalización, servicios a domicilio, gastos de farmacia y otros servicios asistenciales.
Tener un seguro de salud es importante porque te ayuda a protegerte de gastos médicos altos. Sin un seguro, una visita al hospital privado o una cirugía puede costar miles de euros. Con un seguro, puedes evitar gastos o pagar una parte de ellos (según el producto contratado), lo que te brinda tranquilidad y acceso a la atención médica que necesitas.
¿Por qué contratar un seguro médico con Sanitas si tengo una discapacidad?
En Sanitas ofrecemos el producto Sanitas Inclusivo, que hemos diseñado específicamente para atender las necesidades médicas de las personas con discapacidad, a un precio económico. Se trata de un producto de asistencia extrahospitalaria destinado a cubrir las necesidades asistenciales del día a día.
Contar con el seguro médico Sanitas Inclusivo ofrece varias ventajas importantes:
- Es accesible a personas de todas las edades y todo tipo de discapacidad. Siempre será necesario que alguno de los asegurados presente certificado de discapacidad (mínimo discapacidad del 33%).
- No tiene carencias, salvo resonancias y TAC que tendrán 6 meses de carencia.
- No se pide un cuestionario de salud previo a la contratación, no se discrimina por enfermedad prexistente y cualquier cliente con cualquier patología puede acceder al mismo.
- No tiene límite de edad de contratación.
- No exige una edad máxima de permanencia.
- Ofrece acceso al amplio cuadro médico de Sanitas a nivel nacional
- Incluye asistencia en medicina primaria y especialidades, además de sesiones de psicología, fisioterapia y servicios de podología, que contribuyen especialmente al bienestar.
- Incluye los servicios a domicilio más demandados por estas personas. Además de acompañamiento a citas médicas y durante hospitalización, auxiliar a domicilio tras la hospitalización, etc.
- Incluye Blua, los más avanzados servicios digitales de salud que incorporan tecnología punta como la IA, y con una clara orientación preventiva para cuidar de ti en cualquier momento y lugar, sin necesidad de desplazamientos.
- Ofrece una prima económica desde 25€.
Sin duda, contar con un seguro de salud inclusivo, es decir, que se adecue a las necesidades específicas de las personas que tienen una discapacidad, ayuda a recibir una atención adecuada y mejorar la calidad de vida.
