Al hablar de alimentos con gluten hay que diferenciar entre aquellos sobre los que se tiene la seguridad de que contienen esta glicoproteína y los que podrían conterla.
Los alimentos que contienen gluten y que por tanto deben ser eliminados de las personas que son intolerantes a él son los siguientes:
- Pan.
- Harinas de trigo, centeno, cebada, avena, espelta o triticale (un híbrido de trigo y centeno).
- Cualquier producto para cuya elaboración se utilicen las harinas de los cereales ya mencionados, por ejemplo las empanadas.
- Bollería industrial o artesanal.
- Todo tipo de bizcochos y de productos de pastelería.
- Pastas de cualquier tipo (espaguetis, macarrones, etc.), pasta para sopas.
- Sémola de trigo.
- Cualquier alimento precocinado o elaborado en el que no se indique de forma específica que no contiene gluten.
- Chocolate.
- Infusiones y bebidas preparados con cualquiera de los cereales indicados.
El uso del gluten como aditivo y la falta de claridad del etiquetado complica mucho la identificación de aquellos productos alimenticios que no contienen gluten, salvo que el fabricante lo ha constar con claridad en el envase o el envoltorio. Es por ello que, ante la duda y salvo que se advierta de lo contrario, conviene evitar también los siguientes alimentos:
- Todo tipo de charcutería, embutidos o productos elaborados con carne.
- Patés.
- Queso fundido, queso para sandwich (en láminas).
- Productos precocinados.
- Conservas.
- Dulces y caramelos.
- Café y té instantáneos.