Burnout o el síndrome del trabajador quemado

En línea con la tendencia de cuidar a los empleados y procurar su bienestar, hace unos años que se está estudiando y poniendo foco en el denominado síndrome del trabajador quemado, también conocido como burnout.

Se produce por la concurrencia de situaciones profesionales, sociales y personales que llegan a sobrepasar a la persona que lo padece, derivando en un gran estrés. Desde el inicio de la pandemia han aumentado los casos debido al incremento de la incertidumbre.

¿Cómo se manifiesta este síndrome?

Un síndrome está compuesto por un cuadro clínico o conjunto de síntomas que concurren en tiempo y forma. En el caso del burnout, algunas de las manifestaciones que pueden presentarse son:

Ansiedad o depresión, o una combinación de ambas.
Mayor irritabilidad y agresividad..
Disminución de la agudeza mental..
Agotamiento físico y mental. La somatización puede producir palpitaciones, taquicardias, problemas dermatológicos y otras consecuencias más graves.
Disminución de la autoestima, cuestionamiento de la valía personal..
Apatía y desinterés por el trabajo.

Algunas cifras a destacar de la segunda oleada del Estudio de Sanitas sobre el bienestar emocional.

El 42 % de la población que realizó trabajo en remoto durante el 2020 sufrió una disminución en su bienestar emocional.
Un 52 % de los que realizaron teletrabajo se sintieron más tristes y desmotivados debidos a la drástica disminución de las relaciones sociales.
Un 20 % de los españoles se ha visto emocionalmente afectado por convertir su hogar en lugar de trabajo a la vez que compartía espacio con sus hijos.
A un 40 % les ha afectado negativamente la falta de presencialidad en cuanto a su productividad. Refieren dificultades para desarrollar todo su potencial y mantener su nivel productivo.
Los varones, especialmente mayores de 50 años, son menos dados a pedir ayuda profesional para sus problemas emocionales.

¿Qué consecuencias conlleva el burnout?

Tiene efectos directos e indirectos, tanto para la empresa como para el trabajador:

Aumento del absentismo laboral, tanto por el malestar físico como por el emocional.
Desmotivación, que conlleva una menor productividad.
También repercuten en la productividad las alteraciones que se producen en la memoria y el aprendizaje, debidos al estrés.
Problemas con el resto de compañeros, ya que disminuyen la paciencia y la templanza. Aumenta la crispación y tensiona el clima laboral.
Puede llegar a derivar en problemas psicológicos graves o en otros trastornos.

Medidas para tratar y evitar el burnout

Algunas de las medidas que pueden llevarse a cabo para disminuir el riesgo de que un empleado sufra este síndrome son tarea del propio trabajador y otras que serán por cuenta de la empresa:

Establecer y cumplir unos horarios de trabajo saludables.
Animar a los empleados a llevar buenos hábitos de salud (alimentación, sueño, ejercicio y actividades lúdicas).
Fomentar un adecuado clima laboral. Una buena comunicación interna, programas de resolución de conflictos y condiciones laborales justas, ayudarán a conseguirlo.
Las relaciones sociales en el entorno de trabajo son fundamentales. Hay que mantenerlas incluso si los empleados están teletrabajando.
Cuando se realice teletrabajo, facilitar las condiciones adecuadas al empleado para llevarlo a cabo y que este también procure adaptar el espacio de trabajo lo máximo posible.
Seguir alguno de los consejos que ofrecen los especialistas tales como desconectar de las pantallas y realizar actividades que no impliquen el uso de la tecnología (hacer manualidades, lectura de libros en papel, cocinar, etc.). Esto favorece el descanso y una mejor concentración al día siguiente.

Además de todo lo indicado, siempre es positivo acudir a un especialista que ayude a gestionar las emociones y superar la situación si ya se estuviera produciendo, o bien para prevenirla cuando empiezan a manifestarse los primeros síntomas. Sanitas cuenta en sus seguros de salud, tanto colectivos como individuales, con los profesionales mejor cualificados en salud emocional para superar el síndrome del trabajador quemado. Para ofrecer más facilidades, las sesiones pueden llevarse a cabo a través de videoconsultas.