II. Exceso de peso en España: un daño anual… ¿Qué se debe evitar?
La mayoría de los pacientes con exceso de peso llevan asociadas alteraciones de función metabólica en mayor o menor grado, las cuales producirán muy probablemente cuadros patológicos que inciden en su efectividad, su calidad de vida, la de su entorno y su propia estima.
Entre las patologías que se desprenden del exceso de grasa muy ligadas a una vida sedentaria, son habituales:
- Diabetes
- Hipertensión
- Incremento de colesterol y triglicéridos
- Artrosis
- Enfermedades cardiovasculares
- Gota.
No obstante, en consulta, los especialistas en Endocrinología, Metabolismo y Nutrición, atienden más pacientes por un preventivo sentido estético, sobretodo las mujeres, que por un interés de mejorar su salud o el estilo de alimentación.
Cierto es que la gente joven, cada vez más frecuentemente, solicita consejo sobre una pauta sana de alimentación, interesándose además a cerca de un estilo de vida o revitalización, donde la actividad física ocupa una plaza fija.
El perfil de la persona obesa refleja una edad entre 45 y 54 años, con un menor nivel educacional y socioeconómico y más mujeres que hombres. También es mayor la incidencia de la obesidad en parejas, quizá por su afinidad en comida abundante y tiempo libre sedentario, que en personas solteras.
El estrés emocional sería otro factor sumamente importante a considerar.
Respecto a las pautas de alimentación, las proporciones han variado en relación a tiempos relativamente recientes. Se insiste en dietas sabrosas pero equilibradas, que contengan:
- 55% - 40% de carbohidratos.
- 30% de grasa.
- 15 - 30% de proteínas.
- 20 - 40 gramos de fibra (legumbres, hortalizas, alimentos integrales)
- Poca sal.
Se trata de pautas alimentarias con menús de contenido nutritivo completo, variado, equilibrado y personalizado. A mayor cantidad de carbohidratos de absorción rápida (harinas refinadas, bollería, pastelería, chocolate...) mayor demanda de insulina, mayor apetito y más tendencia a ganar peso o más lentitud en perderlo.
La actividad física, desde la práctica de bicicleta estática o el paseo de 30 minutos, a la práctica de deporte periódico, es casi preceptivo.
Obviamente, mientras llegan consejos y consensos generales de comportamiento sano, de nuevo hemos de insistir que el acudir a vuestro endocrinólogo, significa poder planificar personalmente una terapia tridimensional clínica, dietética y dinámica.