La hidrocefalia normotensiva es una forma poco conocida pero tratable de demencia que afecta principalmente a personas mayores. Su detección temprana es clave, ya que con el tratamiento adecuado, los síntomas pueden mejorar e incluso revertirse. Aunque suele confundirse con otros tipos de deterioro cognitivo, la demencia por hidrocefalia tiene características clínicas propias que permiten su diagnóstico.
En este artículo abordamos qué es, cómo se manifiesta y qué opciones existen para el tratamiento en adultos y, especialmente, en mayores de 80 años.
¿Qué es la hidrocefalia normotensiva?
La hidrocefalia normotensiva es una acumulación anormal de líquido cefalorraquídeo (LCR) en los ventrículos del cerebro. A diferencia de otras formas de hidrocefalia, en este caso la presión intracraneal se mantiene dentro de valores normales, pero el exceso de líquido provoca compresión del tejido cerebral y alteraciones neurológicas.
Hidrocefalia en mayores de 80 años: características principales
En los adultos mayores, especialmente a partir de los 80 años, esta condición puede pasar desapercibida o diagnosticarse erróneamente como Alzheimer o párkinson. Sin embargo, se diferencia porque la hidrocefalia en mayores de 80 años suele presentar una combinación de síntomas físicos y cognitivos únicos.
Diferencias entre hidrocefalia normotensiva y otros tipos de hidrocefalia
La hidrocefalia normotensiva del adulto es distinta de la hidrocefalia congénita o la hidrocefalia obstructiva. En adultos, los ventrículos se dilatan lentamente, y aunque la presión del líquido se mantiene estable, provoca daño progresivo en áreas del cerebro relacionadas con la memoria, la marcha y el control de esfínteres.
Causas de la hidrocefalia normotensiva
- Hemorragia cerebral: es un derrame cerebral causado por la ruptura de un vaso sanguíneo en el cerebro. Puede provocar sangrado en el tejido cerebral, lo que puede dañar las células cerebrales.
- Traumatismos craneoencefálicos severos: un traumatismo craneoencefálico grave es una lesión en la cabeza que causa daño al tejido cerebral.
- Enfermedades infecciosas como la meningitis: algunas enfermedades infecciosas, como la meningitis, pueden causar inflamación de las meninges, las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal.
- Haber sido sometido a una intervención quirúrgica craneal: ciertas cirugías craneales pueden dañar las vías que drenan el líquido cefalorraquídeo del cerebro.
Síntomas de la hidrocefalia normotensiva en ancianos
Los síntomas clásicos de la hidrocefalia normotensiva en ancianos forman una tríada característica, aunque no siempre aparecen al mismo tiempo ni con la misma intensidad.
Signos de demencia por hidrocefalia
Los tres síntomas más frecuentes de la demencia por hidrocefalia son:
- Dificultad para caminar (marcha lenta, inestable o con pasos cortos).
- Pérdida progresiva de memoria y atención.
- Incontinencia urinaria sin causa urológica aparente.
Este patrón, conocido como “marcha de apraxia + deterioro cognitivo + incontinencia”, debe hacer sospechar de hidrocefalia normotensiva del adulto mayor y derivar a un especialista. La marcha suele ser uno de los primeros síntomas detectables y puede confundirse con el párkinson o una simple debilidad por la edad.
Diagnóstico y pruebas para la hidrocefalia en adultos mayores
Detectar esta condición requiere una combinación de pruebas clínicas e imagen. El diagnóstico correcto permite diferenciar la hidrocefalia normotensiva de otras demencias más comunes y abre la puerta a un tratamiento eficaz.
Métodos para detectar hidrocefalia normotensiva
Las pruebas más utilizadas son:
- Resonancia magnética o TAC cerebral para observar la dilatación de los ventrículos.
- Test de marcha y memoria realizados por el equipo neurológico o geriátrico.
- Test de drenaje lumbar (punción lumbar con extracción de líquido) para comprobar si hay mejoría transitoria de los síntomas.
Estos procedimientos ayudan a confirmar si existe relación entre los síntomas del paciente y el exceso de LCR, y permiten planificar el tratamiento con mayor seguridad.
Tratamiento de la hidrocefalia normotensiva en el adulto mayor
A diferencia de otras formas de demencia, la demencia por hidrocefalia puede ser tratada de forma eficaz mediante cirugía. El tratamiento más habitual es la colocación de una válvula de derivación (shunt), que permite drenar el exceso de líquido hacia otra parte del cuerpo, como el abdomen.
La hidrocefalia normotensiva del adulto tratamiento quirúrgico puede mejorar significativamente la marcha, la atención y el control vesical. En algunos casos, la mejoría es inmediata; en otros, más progresiva. El pronóstico dependerá de la rapidez del diagnóstico y del estado general del paciente.
Además del tratamiento quirúrgico, se recomienda el acompañamiento mediante fisioterapia, estimulación cognitiva y seguimiento neurológico periódico.
Reconocer los síntomas de hidrocefalia en ancianos y actuar a tiempo permite ofrecer una segunda oportunidad a muchos pacientes que, de otro modo, podrían ser diagnosticados erróneamente con demencias irreversibles. En Sanitas, evaluamos cada caso con un enfoque integral y personal, combinando tecnología, experiencia y atención humana.