Una de las cosas que hay que tener muy claras a la hora de optar por una depilación láser o una fotodepilación es que no los aparatos que se utilizan no son apropiados para todos los tipos de piel y vello y que es fundamental elegir el más adecuado para cada caso.
De ahí la importancia de elegir bien el centro de estética o la clínica dermatológica donde se va a realizar y asegurarse de que se efectúa un estudio previo de la piel y el vello, así como que dispone de los aparatos adecuados para cada tipo de paciente, pues cada sistema tiene sus limitaciones, sus ventajas y sus inconvenientes:
- Láser diodo: es efectivo en pieles oscuras y bronceadas, especialmente de fototipos comprendido entre el IV y el IV, así como para la eliminación de pelos de calibre grueso y color oscuro (marrón y negro). Además tiene una mayor capacidad de penetración en la piel. Otra ventaja es que permite el tratamiento de zonas amplias, lo que hace que esta técnica sea más adecuada para la depilación masculina, siempre que respeten las necesarias indicaciones del tipo de piel y vello. Resulta muy efectiva a corto plazo, aunque aún está por determinar su eficacia en el largo plazo.
- Fotodepilación o IPL: no se trata de una depilación láser, sino que se utiliza luz pulsada de alta intensidad, aunque actúa del mismo modo que cualquiera de los láseres. Su principal ventaja es que se puede regular la longitud de onda en función de cada paciente, ajustando tanto la energía que se va aplicar como el tiempo entre un pulso de luz y otro. Esto permite que se pueda utilizar en muchos tipos de piel y color de pelo, incluyendo el rubio y el pelirrojo.
Los mejores resultados, no obstante se dan en personas de piel clara y pelo oscuro. Asimismo aplicar sobre grandes extensiones de piel en muy poco tiempo, y con un riesgo mínimo de posibles efectos adversos, aunque puede dejar manchas en la piel. No puede utilizarse en pieles bronceadas y no se puede tomar el sol en tanto dure el tratamiento.
Depilación Láser
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- Láser Alejandrita: únicamente puede utilizarse en pieles con un fototipo inferior a IV y nunca en pieles bronceadas. Pero resulta más eficaz para eliminar el vello fino. Cuánto más clara sea la piel mejores serán los resultados. Una de sus principales ventajas es que acorta el tiempo necesario para el tratamiento, pero resulta más doloroso que el láser diodo y el IPL, además de que puede causar cambios en la pigmentación de la piel, propiciando la aparición de manchas.
