Alcohol
El alcohol que se ingiere pasa a la sangre y a través de la placenta llega al feto, y es posible que dañe su salud.
Los efectos que el alcohol puede provocar en el feto son:
- Alteraciones neurológicas y del comportamiento: hiperactividad, alteraciones en el aprendizaje, depresión.
- Bajo peso al nacer.
- Retraso en el desarrollo y en el crecimiento.
Para mayor seguridad, lo mejor es que no se beba nada de alcohol durante el embarazo. Por lo menos, se evitará beber durante los tres primeros meses y después se intentará limitar al máximo su consumo.
Tabaco
Cuando se fuma o cuando la mujer se expone con regularidad al humo de los demás (fumador pasivo), el monóxido de carbono y la nicotina pasan desde la sangre de la madre a la del bebé, lo que limita la cantidad de oxígeno y de nutrientes que recibe el bebé.
Fumar durante el embarazo se ha asociado a muchos problemas graves, como aborto espontáneo, parto prematuro, bajo peso al nacer y síndrome de la muerte súbita del lactante, entre otros.