Causas, síntomas y tratamiento de la pubalgia

02/09/2025
pubalgia lesión frecuente deportistas

La pubalgia es una afección frecuente entre deportistas, aunque también puede afectar a cualquier persona que se expone a actividades o movimientos repetitivos de miembros inferiores.

Se caracteriza por un dolor intenso e insidioso en la zona del pubis, la ingle o la zona abdominal inferior. Puede instaurarse durante un periodo corto de tiempo y resolverse sin complicaciones, pero en algunos casos, si no se trata desde el inicio, puede llegar alargarse y pasar a ser una dolencia crónica.

Comprender qué es la pubalgia, sus síntomas, causas y opciones de tratamiento es clave para abordarla de forma eficaz y recuperar la función de la zona.

¿Qué es la pubalgia?

La pubalgia es una patología que se manifiesta principalmente en la parte baja del abdomen y de la zona púbica. Aunque su aparición se asocia con frecuencia al deporte, especialmente al fútbol, la carrera o el hockey, realmente cualquier persona puede desarrollarla.

Definición de pubalgia

Cuando hablamos de pubalgia, nos referimos a un síndrome doloroso que afecta a la sínfisis del pubis y a los tejidos adyacentes, debido a una posible lesión de los distintos grupos musculares de la zona inguinal y abdominal baja. El cuadro clínico suele incluir un dolor moderado-intenso profundo, localizado, y que suele aumentar al caminar, correr o realizar esfuerzos.

La pubalgia no es una enfermedad en sí, sino un conjunto de síntomas que reflejan la sobrecarga o lesión de las distintas estructuras que se insertan en la región ilio-pubiana.

Comúnmente se le conoce también como pubalgia del deportista u osteopatía del pubis. En cualquier caso, todos apuntan al mismo problema: dolor e inflamación en el área púbica, con origen en el sistema musculoesquelético.

Síntomas de la pubalgia

Reconocer los síntomas de pubalgia es fundamental para buscar ayuda médica a tiempo y evitar que el dolor se intensifique o alargue demasiado.

El síntoma más frecuente es el dolor en la ingle, que puede irradiarse hacia el abdomen, los genitales o la parte interna de los muslos (zona aductora). Este dolor suele presentarse de forma gradual, aunque en algunos casos aparece bruscamente tras un entrenamiento o esfuerzo intenso.

Otros síntomas y signos comunes son:

  • Dolor al levantarse de la cama o cambiar de posición
  • Dolor tras periodos de sedestación largos
  • Cojera intermitente
  • Sensación de rigidez en la zona púbica.
  • Disminución del rendimiento deportivo.
  • Molestias al toser o estornudar.
  • Dolor al realizar ejercicios abdominales y ejercicios que impliquen sobre todo a los aductores.

¿Cómo saber si tengo pubalgia?

Para saber si tienes pubalgia, es esencial acudir a un profesional de la salud (preferiblemente a un traumatólogo) que realice una exploración física y, si es necesario, pruebas complementarias como la ecografía, resonancia magnética o radiografía. Estas herramientas permiten descartar otras patologías que puedan causar una sintomatología similar como hernias inguinales, afecciones urogenitales o problemas articulares de cadera.

Principales causas de la pubalgia

Las causas de la pubalgia pueden ser variadas, aunque casi todas están relacionadas con un sobreesfuerzo o una sobrecarga repetitiva. Algunas de las causas más comunes incluyen:

  • Sobrecarga de los músculos aductores o abdominales: el esfuerzo repetido puede provocar tendinopatías en la inserción de estos músculos, microrroturas o en general tensión en toda la zona.
  • Desequilibrio entre musculatura abdominal y de los aductores: si un grupo muscular está más desarrollado que el otro, se pueden generar tensiones indeseadas que pueden derivar en una pubalgia.
  • Falta de calentamiento o estiramiento adecuado: especialmente en deportistas.
  • Técnicas deportivas repetitivas: durante algunos deportes que implican cambios de dirección bruscos, golpeo de balón, cambios de velocidad intensos, pueden desencadenar este tipo de sobrecargas a largo plazo.
  • Cambios bruscos de intensidad o superficie de entrenamiento: pasar de un terreno blando a uno más duro sin adaptación puede provocar lesiones de miembro inferior, incluida la pubalgia.
  • Alteraciones posturales o biomecánicas: como una mala pisada o escoliosis, que repercuten en la pelvis.

En muchos casos, la pubalgia es la consecuencia de una combinación de factores, no de una causa única.

Tratamiento para la pubalgia

El tratamiento de la pubalgia debe adaptarse al grado de lesión, el tiempo de evolución y las necesidades del paciente. Lo más importante es realizar un enfoque multidisciplinar que suele incluir inicialmente el reposo relativo, la corrección postural, distintas técnicas de fisioterapia y en algunos casos tratamiento farmacológico.

¿Cuánto tiempo tarda en curarse la pubalgia?

La duración del tratamiento varía según el caso. En situaciones leves, la mejoría puede llegar en unas semanas con reposo, hielo y ejercicios específicos. Sin embargo, en casos crónicos, la recuperación puede extenderse de tres a seis meses o incluso más.

Las fases habituales del tratamiento incluyen:

  1. Reposo relativo: evitar actividades que agraven el dolor, pero mantener la movilidad funcional. En muchas ocasiones es necesario unos días de reposo deportivo.
  2. Uso de antiinflamatorios o analgésicos: prescritos por un médico para reducir el dolor y la inflamación.
  3. Fisioterapia personalizada: centrada en el manejo del dolor, el ejercicio terapéutico y distintas técnicas pasivas para el manejo del dolor.
  4. Aplicación de frío local y técnicas como electroterapia o punción seca: ayudan a aliviar los síntomas y mejorar la recuperación muscular.
  5. Ejercicios de estabilización y propiocepción: para fortalecer toda la zona abdomino-pélvica y prevenir futuras recaídas.

En algunos casos en los que no se logra una mejora con el tratamiento conservador, puede valorarse la intervención quirúrgica, especialmente en caso de deportistas.

La clave para superar una pubalgia está en no precipitar el regreso a la actividad física y realizar un proceso de readaptación adecuado guiado por un profesional sanitario.

Sanitas - Bupa

SANITAS

Este contenido ha sido escrito por médicos especializados de los centros y Hospitales de Sanitas.

Nuestro propósito es promover vidas más largas, sanas y felices y un mundo mejor.

La información facilitada por este medio no puede, en modo alguno, sustituir a un servicio de atención médica directa, así como tampoco debe utilizarse con el fin de establecer un diagnóstico, o elegir un tratamiento en casos particulares. En este servicio no se hará ninguna recomendación, explícita o implícita, sobre fármacos, técnicas, productos, etc... que se citarán únicamente con finalidad informativa. La utilización de este servicio se lleva a cabo bajo la exclusiva responsabilidad de los usuarios.

En este servicio no se hará ninguna recomendación, explícita o implícita, sobre fármacos, técnicas, productos, etc... que se citarán únicamente con finalidad informativa. La utilización de este servicio se lleva a cabo bajo la exclusiva responsabilidad de los usuarios.

La utilización de este servicio se lleva a cabo bajo la exclusiva responsabilidad de los usuarios.

Contar con la confianza de Sanitas al mejor precio
Cuida tu salud, al mejor precio
  • Amplio cuadro médico
  • Hospitales y centros propios
  • Atención al cliente 24/7
  • Seguros con y sin copago
Calcula tu seguro
Calcula tu seguro
Te Llamamos Calcula tu seguro