Un embarazo múltiple se produce como resultado de la fecundación de dos o más óvulos (mellizos), o cuando un óvulo se divide (gemelos idénticos).
En las dos últimas décadas se ha producido un aumento significativo de los embarazos múltiples. Existen distintos factores que pueden favorecer a ello:
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Herencia genética: los antecedentes familiares de mellizos o gemelos aumentan las posibilidades de que se produzca un embarazo múltiple.
- Edad: a partir de los 30-35 años aumenta la probabilidad de que dé un embarazo múltiple, especialmente si ha habido embarazos previos.
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Tratamientos de fertilidad: los medicamentos que se administran para mejorar la fertilidad mediante la estimulación de los ovarios favorecen que se desprendan dos o más óvulos, que pueden resultar fecundados y, por tanto, dar lugar a un embarazo múltiple.
- Técnicas de reproducción asistida: suelen implantarse en el útero vario óvulos fecundados para lograr que al menos uno de ellos se implante correctamente. Pero pueden hacerlo varios. No obstante, en la actualidad se han desarrollado técnicas que permiten reducir las posibilidades de embarazo múltiples, al menos de más de dos embriones
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